Nadie es ilegal en tierras robadas.

Cartel a partir de una foto de las protestas contra las deportaciones de Trump
Cartel a partir de una foto de las protestas contra las deportaciones de Trump

Realicé este cartel en Gimp, usando filtros de GMIC, a partir de una foto de las protestas contra los planes de deportar y criminalizar migrantes en Estados Unidos. Realmente me conmovieron las imágenes de la gente protestando, y reivindicando su identidad étnica contra el fascista de Trump y sus compinches, sin embargo, no puedo dejar de decir que, si bien es positivo y gozoso y natural que reivindiquemos nuestras identidades, también es un peligro constante caer en ideas nacionalistas.

Cartel para una rifa.

Realicé este cartel en inkscape para una rifa de recolección de fondos para un proyecto de editorial marxista.

Cartel para la rifa solidaria del proyecto Conatus.
Cartel para la rifa solidaria del proyecto Conatus.

2025: Yakarta se acerca

Una bomba molotov es lanzada durante las protestas masivas en Surabaya
Una bomba molotov es lanzada durante las protestas masivas en Surabaya

Hace 60 años lo que sería el modelo de golpe de Estado anticomunista orquestado por la CIA sacudía Indonesia. Las fuerzas que pondrían al dictador Suharto en el poder asesinarían y torturarían hasta un millón de personas.

Nuestro mundo es el mundo de la contrarrevolución triunfante. Es el mundo donde generaciones de jóvenes fueron torturadas y «desaparecidas» (terrible eufemismo) por las dictaduras en Argentina, Uruguay, Brasil, España y un largo etcétera que siguió al sangriento golpe de 1965 en Indonesia. Es el mundo de la «guerra sucia» contra las guerrillas en los 70, es el mundo donde la voz de los medios masivos ahoga los gritos de protesta.

Pero, con todo eso, su crueldad nunca ha logrado ahogar la semilla de la insurrección.

Antes del golpe de 1973 contra Allende, aparecieron pintas en las calles de Santiago que hacían referencia a Yakarta. «Yakarta se acerca», «Viene Yakarta». Era la amenaza de los gorilas, igualmente entrenados por la CIA. La sangrienta represión en Indonesia se había vuelto el modelo del golpe anticomunista.

El «anticomunismo», lejos de enredarse con las ideas de Marx o Lenin, se basa en la mentira de que las luchas sociales se dan por «un puñado de agitadores» que «envenenan las mentes de las masas», y no como es en realidad, las luchas sociales estallan por las injusticias que sufre la gente. Así, tanto en Indonesia como en Chile, como en decenas de países más, al descontento social se respondía con la persecución de socialistas, comunistas, anarquistas, sindicalistas e incluso derechohumanistas bien intencionados y religiosos que sentían piedad de las víctimas de la represión.

El anticomunismo se volvió el credo de todos los medios masivos, como anotan Chomsky y Herman.

Y aún así, lo que hace que se levante la bandera roja de la insurrección es, una y otra vez, el insaciable apetito del capitalismo que busca exprimir hasta la última gota de vida, no los agitadores comunistas.

Hoy Indonesia se viste de protestas, bombas molotov y pancartas anticapitalistas. El terror de los ríos de sangre de 1965, décadas de proscribir al comunismo y de acallar cualquier rebeldía, el exterminio físico y la persecución de cualquier militancia, no lograron acabar con el impulso de protestar ante la opresión.

No pueden destruir con su crueldad e injusticia las luchas que se levantan, precisamente, contra su crueldad e injusticia. Y lo más que pueden lograr, con sus cárceles clandestinas y sus métodos de tortura aprendidos de instructores gringos o israelíes, es que con cada generación se haga más amarga nuestra rabia, más roja nuestra rebeldía, más negra nuestra convicción.

Sí, «Yakarta se acerca», pero lo que no sabían los militares golpistas de hace cinco décadas, es que es nuestra Yakarta la que se acerca.

Omnia sunt communia.

Tipografía a partir de una frase de Ulrike Meinhof.

Frase de Ulrike Meinhof.
Frase de Ulrike Meinhof.

 

Frase tomada del artículo de Ulrike Meinhof «De la protesta a la resistencia» de 1968. Ulrike señala en ese texto que ella misma escuchó la frase de voz de un estudiante negro en un congreso sobre la guerra de Vietnam. A mi me párece terriblemente vigente la frase, y el artículo en general, de cara al genocidio en Palestina, y las anexiones que continúa empujando Israel tanto en Gaza como en Líbano y Siria. No basta con protestar, debemos de evitar que continúe, debemos ponerle un fin.

 

La fuente es Darker Grotesque. Realizado en Inkscape.

Cartel para la segunda etapa del círculo de lectura de El Capital de Marx

Cartel para leer el segundo tomo de El Capital
Cartel para leer el segundo tomo de El Capital

Realicé este cartel en Inkscape para la segunda etapa de un círculo de lectura en el que estoy. Las fuentes fueron Avro, Pannefresco y Fira Sans Condensed.

Usé como referencia la edición de El Capital de Siglo XXI, que es la que estamos leyendo, pero el diseño de lomo y de portada es original, solo parecido al de la editorial.

Mi intencíón detrás de este cartel era hacer algo más lúdico, y poner pequeños escaladores subiendo los 2 tomos del libro, pero como me pasa a menudo, me comieron los tiempos y no tuve tiempo de hacerlo. Como sea, estoy satisfecho con el resultado aunque no haya sido lo que había pensado al principio.

Cartel Don’t Punch Down

Don't punch down, punch up!
Don’t punch down, punch up! No golpees hacia abajo, golpea hacia arriba.

 

Hice este cartel en vez de entrar en interminables pleitos en las redes sociales. ¿Para qué pelear con quien tienes al lado, por equivocado que esté, cuando el enemigo está arriba?

 

Realizado con GIMP, Inkscape y GMIC.

Tres carteles para SOS Racismo Navarra.

Cartel para SOS Racismo, pidiendo justicia en el caso del migrante asesinado por la policía Elhadji
Cartel para SOS Racismo, pidiendo justicia en el caso del migrante asesinado por la policía Elhadji

 

 

Realicé estos tres carteles para SOS Racismo Navarra. Por desgracia, solo uno de ellos salió publicado. El cartel de Elhadji, que sería un pendón, lo terminé demasiado tarde así que no hubo oportunidad de imprimirlo. Los carteles para las jornadas antirracistas sí se usaron, pero el de la mesa de violencia policial no se usó, sino una versión que no incluía la ilustración del policía antimotines.

Cartel para una jornada de Encuentros Antirracistas.
Cartel para una jornada de Encuentros Antirracistas. Este cartel no fue utilizado.
Cartel para una jornada de Encuentros Antirracistas.
Cartel para una jornada de Encuentros Antirracistas.

 

Como siempre, todos los carteles fueron realizados en Inkscape.

Cartel en torno a las elecciones gringas

Una ilustración vectorial de un militante del bloque negro arrojando una bomba molotov.
Una ilustración vectorial de un militante del bloque negro arrojando una bomba molotov.

 

Cartel que realicé por completo en Inkscape, el texto dice «No tienes porqué escoger entre dos maniacos genocidas, puedes elegir resistir», y lo hice de cara a que en las próximas elecciones gringas, los dos candidatos punteros, están por apoyar sin reservas a la entidad sionista y el genocidio del pueblo palestino.

 

Como siempre, pueden descargar el archivo vectorial libre de derechos de OpenClipArt. Las fuentes que utilicé fueron Kiss Kiss from Paris  y Nord-Sud.

 

Militante del bloque negro arrojando una bomba molotov.
Militante del bloque negro arrojando una bomba molotov.

Tres carteles para el Comité por la Liberación de Palestina

Cartel invitando a la segunda pinta por Palestina.
Cartel invitando a la segunda pinta por Palestina.

Dos carteles digitales que realicé para actividades del Comité por la Liberación de Palestina. El de arriba invitando a la Segunda Pinta de un mural en apoyo a Palestina, y el que vemos abajo invitando a la colecta de materiales para actividades en torno a Palestina.

 
Diseño de pegatina para el Comité por la Liberación de Palestina. Este diseño se imprimió en tamaño tabloide y se aplicó en paredes, mobiliario urbano, vitrinas de Starbucks y otras superficies.

Los tres diseños fueron realizados usando Inkscape y GIMP.

Sobre Palestina y la inutilidad de los liberales occidentales, traducción de un texto de Caitlin Johnstone

Sobre Palestina y la inutilidad de los Liberales Occidentales.

Caitlin Johnstone. 3 de Marzo 2024.

Hay un exasperantemente común tipo de liberal que pretende oponerse a las acciones de Israel en Gaza mientras al mismo tiempo dice apoyar «el derecho de Israel a existir», como si la existencia de Israel pudiese separarse de alguna manera de sus asesina naturaleza genocida. Este es un Estado que literalmente no puede existir sin una constante violencia y tiranía, como lo demuestra toda su historia desde su inicio. Desde su origen fue constituido como una colonia del imperialismo occidental, y eso es lo que ha sido desde entonces.

La historia ha establecido de manera concluyente que no es posible imponer un Estado étnicamente puro sobre una población previamente existente en el que esta población preexistente sea subordinada legalmente al nuevo grupo sin tremendas cantidades de guerra, violencia policial, desplazamientos forzados, apartheid, privación de derechos y opresión. Esto no es rebatible. Es un tema resuelto.

¿Es posible tener una nación en la que los judíos sean bienvenidos y respetados? Por supuesto. Existen muchas naciones así fuera de israel, y la mayoría de los judíos del mundo viven en ellas. Lo que **no** es posible es un Etnoestado en la Palestina histórica donde la población preexistente sea tratada como inferior a la población judía sin que esto implique por necesidad violencia, abuso y tiranía permanente. Esta es una evidente contradicción en fines, pero es lo que los liberales que debatimos aquí pretenden que es una posibilidad razonable.

Definitivamente podría haber un Estado en esa región donde los judíos y los palestinos puedan coexistir pacíficamente, pero sería extremadamente distinto del Israel de hoy en día que no podrías pretender que fuera el mismo Estado que el que vemos ahora. Implicaría un una transformación tan dramática de la civilización israelí, un desmantelamiento tan comprehensivo del profundamente enraizado racismo, una reestructuración tan drástica de los sistemas existentes de gobierno, tanto trabajo, sacrificio, humildad, trabajo interior y reparaciones, que sería un sinsentido llamarlo por el mismo nombre.

Y eso no es de lo que los liberales en cuestión están hablando cuando dicen que se oponen a las atrocidades de Israel en Gaza, pero que «apoyan el derecho de Israel a existir». Lo que quieren decir es que desean que Israel sea el Estado tiránico y de apartheid que siempre ha sido, pero que paren las masacres. Quieren que la injusticia continúe, pero quieren que las manifestaciones más violentas de esta injusticia les dejen de causar disonancia cognitiva. Quieren el Status Quo, pero sin el asesino salvajismo que es necesario para la existencia del Status Quo. Quieren creer que viven en una tierra imaginaria de fantasía donde eso es posible.

Para que esta fantasía aparezca más creíble, los liberales pretenden que la violencia que vemos puede ser culpada exclusivamente en el gobierno de Netanyahu, como si las cosas fuesen bien sin Bibi en el poder a pesar de que en los hechos los abusos de Israel empezaron mucho antes de que él apareciera, y a pesar de que las atrocidades en Gaza cuentan con el apoyo de la amplia mayoría de los israelíes. La violencia israelí no es resultado de Netanyahu, Netanyahu es resultado de la violencia israelí. El construyó su carrera política sobre sentimientos que ya estaban ahí.

También se cuentan a si mismos cuentos de hadas acerca de una solución de dos Estados para validar su postura, ignorando hechos inconvenientes como que oficiales israelíes han estado declarando abiertamente que nunca existirá un Estado palestino, que la mayoría de los judíos israelíes masivamente se oponen a esa medida, y a que se construyen asentamientos israelís en los territorios palestinos con el fin explícito de hacer imposible una solución de dos Estados. Los liberales se creen estas fantasías como un especie de apaciguador cognitivo, que les permite relajarse y sentirse bien consigo mismos a pesar de que no están apoyando ninguna propuesta viable que vaya hacia la justicia.

Y para ser claros esto no es sólo lo que piensan los liberales entorno a Israel-Palestina; son todas sus posiciones ante cualquier cosa. Ante cualquier tema su postura es poco más que «mantengamos el Status Quo, pero hagamoslo más psicológicamente confortable para mi.» Nunca quieren hacer lo correcto, sino solo sentir que hacen lo correcto. La suya es una ideología imperialista, militarista, tiránica y oligárquica con un montón de estampas de justicia social que les hacen sentir bien pegadas encima. Una bota en tu cuello y una flor en su cabello.

Eso es lo que son los liberales. Es quien siempre han sido. Phil Ochs publicó la canción «Love Me, I’m a Liberal» (ámame, soy un liberal) en 1966, y no han cambiado un ápice desde entonces. Los temas cambian, así que sus argumentos cambian, pero sus valores de «mantengamos el Status Quo pero hagamos que me sienta bien al respecto» han sido los mismos desde hace generaciones.